Tras un proceso de convocatoria pública fue designada por el Consejo Superior de la Universidad de Ibagué como decana de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas, la contadora Angie Carolina Díaz.
La Decana es contadora pública y especialista en Revisoría Fiscal y Auditoría Externa de la Universidad de Ibagué. Magíster en Finanzas de la Universidad Externado de Colombia en convenio con Columbia University, actualmente es estudiante de la maestría en Educación en la Universidad de los Andes. Certificada en Normas Internacionales de Información Financiera y Normas Internacionales de Auditoría y Aseguramiento con la Association of Chartered Certified Accountants (ACCA) y en la Norma internacional para Pymes del Instituto Interamericano de Contadores. Ha sido consultora y conferencista en temas de implementación de Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF) y la valoración de activos en diversas empresas del país.
Lleva 12 años en la Unibagué donde se ha desempeñado como docente de tiempo completo y directora del programa de Contaduría Pública, y ahora como decana de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas, cargo que desempeñó el semestre anterior en calidad de encargo y a partir de julio de 2017 en propiedad tras ganar el concurso de méritos.
Sus primeros pinitos como docente fueron en su época de estudiante cuando orientó a sus compañeros algunas clases de preparación para los Ecaes, hoy Saber pro. Como estudiante también fue monitora de investigación.
Cuando se graduó vino el dilema de escoger entre una propuesta para vincularse al sector privado o continuar en la Universidad como docente. La Decana viene de una familia vinculada al sector educativo; por ser su mamá profesora, siempre estuvo rodeada de planes de estudios, diseño de talleres, libros y listados de notas, por ello, a la hora de decidir entre las dos alternativas laborales optó por la docencia, una vocación que lleva en la sangre.
Hace parte del grupo de investigación Unidere y su fortaleza es el trabajo con semilleros. Le agrada esta labor porque a través de estos grupos fue como la reclutaron en la Institución cuando era alumna. "Me gusta buscar estudiantes pilos que les llame la atención investigar para comenzar a potencializarlos", agregó.
Se presentó a la decanatura por sugerencia de sus compañeros de Facultad. Por ello, para Angie es un gran orgullo la designación, al tiempo que no niega sentir algo de miedo porque no solo va a trabajar en busca de hacer lo mejor por la Facultad sino porque su finalidad será, también, no defraudar las expectativas que sus compañeros depositaron en ella, especialmente porque muchos no solo son sus colegas sino porque fueron sus profesores.
En el plan de gestión que presentó ante el Consejo Superior abordó tres retos a cumplir en la decanatura, como son: encontrar el diferencial de la Facultad y hacerlo visible no solo en la comunidad académica sino hacia afuera; fortalecer temas internos de la Facultad, ello en lo que tiene que ver con procesos académicos en los cuales ya se trabaja como la reforma curricular y la forma como se abordará el semestre obligatorio de Paz y Región; y el relacionamiento con el sector externo, es el caso del seguimiento y acompañamiento a los egresados, el fortalecimiento de las redes con empresarios y el vínculo con entidades del Estado.
A los 34 años llega a la decanatura, edad que para algunos puede ser temprana para este cargo; no obstante, considera que "la mejor edad es cuando uno siente que puede conjugar la energía, el conocimiento y cierto nivel de experiencia para ponerlos en favor de algo" y ese algo es la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad de Ibagué.